Inicia la primavera, y con ella, el despertar de toda la belleza que la madre naturaleza puede ofrecer. Rodeada por el exuberante paisaje del parque natural del lago de Sanabria, se encuentra una de las maravillas ecológicas más impresionantes de Castilla y León: la Cascada de Sotillo. Este hermoso salto de agua, es un espectáculo que atrae a visitantes de todas partes, deseosos de contemplar su grandeza y experimentar la tranquilidad de su entorno.
Conexión con la naturaleza
La ruta hacia la cascada de Sotillo representa una aventura que comienza en el pintoresco pueblo de Sotillo de Sanabria. Con su discreta y tranquila ubicación, y sus menos de 50 habitantes, este enclave ofrece un ambiente que prepara al visitante para la edificante experiencia que le espera.
El sendero revela un paisaje donde predominan los robles, castaños, acebos y arbustos típicos de cotas más altas. A medida que se avanza hacia el corazón de este bosque frondoso, el sonido del agua se hace presente, anunciando la proximidad de la cascada y la llegada al paraíso natural.
La espectacularidad del agua
La cascada de Sotillo es un salto de agua que mide de más de veinte metros y se erige sobre el río Pingón. En épocas de deshielo o lluvias abundantes, este salto de agua tiene la peculiaridad de convertirse en las cascadas de Sotillo, con varias caídas de agua que aumentan su vistosidad y su cauce, creando imponentes cortinas acuáticas, que enriquecen al paisaje y deleitan a los caminantes.
Así mismo, La cristalinidad y la temperatura de sus aguas frescas son una invitación irresistible para los senderistas, que ansiosos van a deleitarse con la paz y armonía que ofrece el lugar, y que acuden con alegría y entusiasmo a recibir la primavera, celebrando con júbilo la caída de las primeras aguas del deshielo.
Un trayecto de encanto
El recorrido hacia la cascada es circular, de unos siete kilómetros, con una dificultad media. El primer tramo, es el que representa mayor nivel de exigencia antes de llegar a la cascada como tal, ya que es una subida constante con un desnivel de 350 metros. Sin embargo, durante el trayecto se puede disfrutar de la naturaleza reverdecida, diversidad de mariposas y aves propias del entorno del parque natural, además del frescor de la brisa húmeda que provee la cascada.
Cascada de Sotillo: un destino para todos
A pesar de la mediana dificultad de ruta, la cascada de Sotillo no es únicamente un destino para los amantes del senderismo; es un lugar de refugio para aquellos que buscan un momento de paz, una conexión profunda con la naturaleza o sencillamente, un espacio para admirar la fuerza y belleza del agua en su estado más esencial.
Conservación y sostenibilidad
Es importante mencionar el compromiso con la conservación y sostenibilidad de este espacio. El parque natural del lago de Sanabria, trabaja incansablemente para garantizar que lugares como la cascada de Sotillo, puedan ser disfrutados por generaciones futuras, manteniendo el equilibrio entre la actividad humana y la conservación del ambiente.
Cascada de Sotillo: actividades para disfrutar
Además del senderismo, la zona es ideal para la fotografía de naturaleza. Organizaciones como la Asociación zamorana de guías de turismo y Turismo Zamora, ofrecen actividades familiares, como excursiones educativas, donde tanto niños como adultos pueden aprender sobre la biodiversidad del área. También es un sitio propicio para picnics y relajación, donde se puede disfrutar de todo lo que esta cascada tiene para ofrecer.
El sendero que conduce a la Cascada de Sotillo representa un obsequio natural único, otorgado a la encantadora región de Sanabria. Es un camino que invita a los entusiastas del senderismo y la naturaleza a emprender y disfrutar plenamente, desde el comienzo hasta el final de la travesía y dar de corazón la bienvenida a la primavera.